07 agosto 2015

Yucatán y su miel de abejas

Por: Mariely Lavin Tierra
De las mejores mieles de México es de la península
Las colmenas se establecen en apiarios fijos en lugares estratégicos

En el mercado internacional se comercializan alrededor de 300 000 toneladas de miel al año, México participa en éste con el diez por ciento en promedio, con lo cual ocupa el tercer lugar como país exportador, después de China y Argentina.

La principal región productora es la Península de Yucatán, que participa con alrededor de la tercera parte de la producción nacional y cuya miel es exportada en buena parte a los países de la Unión Europea.

La miel mexicana se exporta en su mayoría  a Alemania, Reino Unido y Estados Unidos. Hoy se producen en el mundo más de un millón de toneladas de miel. Los países europeos, aunque son importantes productores, son también los principales importadores debido a la gran aceptación que tiene la miel en esa región geográfica.
La más conocida a nivel mundial es producida por Apis mellifera, especie utilizada en prácticamente todo el mundo por su alta productividad y gran capacidad de adaptación a diversos ambientes.

De panal en panal

Localizada al sureste de México y rodeada por las aguas del Mar Caribe y del Golfo de México, la Península de Yucatán está cubierta por diferentes tipos de vegetación tropical de baja altitud, como bosques tropicales caducifolios, subcaducifolios y perennifolios, con importantes áreas con vegetación hidrófila hacia las zonas costeras. Los diferentes subtipos y asociaciones vegetales se distribuyen influenciados por un gradiente de precipitación que va de 400 mm de precipitación promedio anual en el norte, hasta 2,000 mm que se registran en el sur de la Península. Se han descrito cerca de 2,300 especies de plantas vasculares presentes en la región.

La dulzura del bosque, la miel y el comercio Apis mellifera es introducida a la Península de Yucatán a principios del siglo pasado, alrededor de 1911. Es probable que la primera haya sido la subespecie A. mellifera mellifera, conocida como abeja negra o alemana. Más adelante, llega la abeja italiana, A. mellifera ligustica, subespecie que se adopta rápidamente por ser muy productiva y dócil.
La apicultura en la península es una actividad básicamente realizada por pequeños productores para quienes, dentro de un sistema de producción de autosubsistencia, la venta de miel representa una entrada de ingresos complementaria.

Las técnicas utilizadas son muy rústicas, con poca inversión en equipo y capacitación técnica y utilizando mano de obra familiar. Las colmenas se establecen en apiarios fijos en lugares estratégicos para el aprovechamiento de las diferentes floraciones, a diferencia de otras regiones en donde los apicultores movilizan sus apiarios según los picos de floración en diferentes ecosistemas. La producción de miel es posible de esta forma gracias a la rica flora melífera de la región.

Xuna'an kab, la abeja maya

Las abejas melíferas son insectos que viven en colonias con un alto grado de organización social. En cada colonia vive una sola reina y su función principal es poner huevos, que en época de crecimiento de la colonia pueden ser hasta 1,500 diarios. Las abejas de una colonia se reconocen y diferencian de otra por las feromonas que su reina produce. Los zánganos son individuos machos. Su función es fecundar a la reina; después del vuelo nupcial mueren. Sólo viven alrededor de un mes y aquellos que no logran aparearse son expulsados de la colmena por las obreras. Las obreras son abejas hembras, pero sus órganos reproductores no están desarrollados. De acuerdo con su edad y desarrollo, realizan diferentes tareas. Limpian las celdas de cría, cuidan la alimentación de las larvas y la reina, elaboran y almacenan la miel y el polen, elaboran también la jalea real con la cual alimentan a la reina y la cera con la que construyen los panales, y colectan néctar, polen, agua y propóleo. La vida de una obrera varía dependiendo del trabajo que realiza, en época de cosecha, viven sólo seis semanas, fuera de ésta pueden llegar a vivir seis meses. De estos insectos de cuerpo cubierto de pelo que se alimentan del néctar y polen que encuentran en las flores. De las once familias en que se dividen, ocho se encuentran en México, la mayoría son solitarias y viven en las zonas áridas del país. Sólo algunos miembros de la familia Apidae son verdaderamente sociales, viven en colonias organizadas y construyen panales en donde almacenan su alimento.

Cosechas y crisis

El ciclo apícola está en estrecha relación con el ciclo de la lluvia. El principal periodo de cosecha ocurre durante la temporada seca, de febrero a mayo o junio, según el comienzo de las lluvias. En esta época florece gran parte de las especies nectaríferas y las abejas producen miel en cantidades suficientes para mantener su población y acumular excedentes para la época de escasez; es esta miel almacenada la que el apicultor cosecha sin riesgo de dañar la población de abejas. Al principio de la temporada de lluvias, aunque la floración está en su máximo punto, el alto grado de humedad no permite a las abejas trabajar eficientemente, la miel que se cosecha en este corto periodo tiene un alto grado de humedad, algunos apicultores la venden a precios bajos y otros la guardan para alimentar a las abejas durante la época de crisis.


El largo periodo de lluvias, de agosto a noviembre, representa la época de crisis para las abejas. En este tiempo pocas especies melíferas florecen, sin embargo, éstas son de gran importancia para el mantenimiento de las colonias; muchos apicultores incluso tienen que proporcionar alimento extra a sus abejas. En la época de transición de la temporada de lluvias a la seca un número significativo de especies comienza a florecer, proporcionando a las abejas néctar para fortalecer sus poblaciones y prepararse para el periodo de abundancia, es la época de recuperación.
Otros componentes como minerales, vitaminas y otros, son en gran parte responsables de las características distintivas de color, sabor y aroma de este producto yucateco conocido en todo el mundo.

Alertas

La vegetación natural de la Península se ha visto fuertemente alterada por las actividades humanas, sobre todo en el norte, en donde la deforestación y la introducción de agricultura y ganadería extensivas han dejado grandes áreas deterioradas. Diversos estudios han reportado más de 200 especies que son aprovechadas por las abejas, incluyendo árboles, arbustos, trepadoras y plantas anuales que se distribuyen en los diferentes tipos de vegetación, desde las zonas recientemente perturbadas, hasta los bosques más conservados.

Dónde hospedarse

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Tomada de/Fuente: http://www.mexicodesconocido.com

Cacalchén al igual tiene gran cantidad de productores/apicultores que llevan años con su colmenas. Y también buen lugar para llegar a conocer y está a unos 40 km aproximado. Todo #Yucatán de las mejores mieles del país.

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